Si no se detiene, la masiva fiebre del carbón en la India destruirá las tierras y los medios de vida de decenas de miles de personas indígenas. Están organizando una resistencia arriesgada y valiente, y necesitan urgentemente que los apoyemos.
El primer ministro de la India, Narendra Modi, ha hecho de la expansión masiva de la minería del carbón en el país su misión personal, especialmente en tierras indígenas. Su gobierno va camino de duplicar la cantidad de carbón que se extrae en menos de 10 años. Para conseguirlo, se están vendiendo enormes extensiones de bosques indígenas sin su consentimiento. Grandes empresas como Adani, Jindal y Vedanta se quitan de las manos los yacimientos de carbón que salen a subasta como parte de la fiebre del carbón de Modi.
De salir adelante, el plan destruirá los bosques en que los adivasis (los pueblos indígenas de la India) han vivido y gestionado desde tiempos inmemoriales. Se verán abocados a la indigencia al destruirse sus medios de vida, y serán expulsados de sus tierras sagradas y ancestrales. Además, tendrá un impacto nefasto en los esfuerzos para combatir la crisis climática.
Los indígenas han organizado protestas pacíficas, desafíos legales y bloqueos. Por su resistencia, han sufrido detenciones, palizas e incluso asesinatos. Necesitan urgentemente nuestro apoyo y solidaridad.
El Ministerio del Carbón ha anunciado planes para aumentar la extracción carbonífera a mil millones de toneladas al año. Y esto a pesar de que el Secretario General de la ONU, António Guterres, declaró en 2021: “Pido a todos los gobiernos, empresas privadas y autoridades locales que cancelen todos los proyectos mundiales de carbón en curso y pongan fin a la mortal adicción al carbón”.
Todo el horror de la minería del carbón
Actúa para ayudar a los adivasis del bosque de Hasdeo
Los que pierden sus casas, territorios o bosques a causa de las minas reciben pocas compensaciones. Se destruyen sus medios de vida autosuficientes y basados en la tierra, y a menudo acaban como trabajadores explotados en las mismas minas que han destrozado sus tierras.
Destrucción de arboledas sagradas
Para los adivasis, no sólo se destruyen sus tierras, hogares y medios de vida: también se arrasan con los espacios sagrados que forman el corazón de sus creencias. Las religiones adivasis se basan en el culto a la naturaleza, pero son denigradas y ridiculizadas por gran parte de la élite urbana. La pérdida de estos bosques es una crisis existencial para los gonds y otros pueblos indígenas.
Jainandan Porte explica: “Cuanto necesitamos para llevar a cabo nuestros rituales está únicamente disponible en el bosque. Si se abren las minas, el bosque será destruido y nuestra cultura se perderá. Nos convertiremos en un pueblo indígena olvidado”.
La resistencia de los adivasis
Se enfrentan a enormes poderes: las empresas, el gobierno, la policía y a veces incluso hasta los tribunales de justicia aúnan esfuerzos para reprimir y perseguir a los adivasis, especialmente a quienes se atreven a resistir.
Se ha usado una amplia gama de tácticas contra ellos: el asesinato extrajudicial de los considerados líderes de la resistencia, amenazas y abusos sexuales, falsos cargos criminales, la construcción de campamentos policiales en el interior de las tierras adivasis y hasta etiquetar a los líderes como “antinacionales”, reteniéndolos durante periodos interminables excusándose en draconianas leyes antiterroristas. Las comunidades han sido intimidadas, engañadas, sobornadas y golpeadas para que no se interpongan en el camino de los proyectos mineros.
Actúa para apoyar a los adivasis
Aliados con los defensores de las tierras adivasis
Hace falta un gran valor para enfrentarse a estas amenazas, pero los miembros de la comunidad consideran que no les queda otra opción.
Estas valientes comunidades están arriesgando sus vidas para conservar sus bosques y que el carbón quede en el subsuelo. Necesitan nuestra solidaridad y apoyo.
Dile al Primer Ministro Narendra Modi: deja el carbón en el suelo, deja vivir a los adivasis →