Preguntas y respuestas: indígenas aislados de Papúa
Algunas comunidades aisladas de Papúa Occidental rechazan el contacto con foráneos.
¿Cuántas tribus no contactadas hay en Papúa Occidental?
En los últimos años se han identificado más de cuarenta tribus no contactadas que viven en Papúa Occidental. Aunque muchos de estos pueblos indígenas han mantenido algún tipo de contacto, hay otros que eligen mantenerse aislados.
Sin embargo, es extremadamente difícil hacer afirmaciones categóricas, por los motivos que exponemos a continuación.
¿Dónde viven?
Viven en las remotas selvas de Papúa Occidental.
¿Por qué no hay información precisa sobre su población y dónde se encuentran?
Es necesario que seamos imprecisos con respecto a la localización y a la población de las tribus no contactadas, si queremos protegerlas de las amenazas externas.
Por otro lado, es casi imposible conseguir información fiable sobre los pueblos indígenas no contactados de Papúa Occidental, ya que las organizaciones de derechos humanos y los periodistas tienen prohibida la entrada, por lo que las posibilidades de investigación están muy limitadas.
Además, el remoto y traicionero territorio de Papúa Occidental impide el acceso fácil. Hay pocas carreteras en las regiones más remotas; de hecho, las extensas tierras altas no fueron cartografiadas hasta la década de los años 30. Los mapas topográficos aún tienen espacios en blanco por “falta de datos” que corresponden a zonas de selva.
¿Cuáles son las amenazas externas para los indígenas no contactados de Papúa Occidental?
Las tribus aisladas se ven amenazadas por las enfermedades que trae el turismo irresponsable, por la represión militar y por la invasión de los mineros, los dueños de plantaciones, los madereros y por otros muchos que persiguen los recursos naturales de sus tierras.
El expediente en materia de derechos humanos de Papúa Occidental es infame, y el racismo arraigado es endémico. De los pueblos indígenas se piensa, en general, que son sucios, “atrasados” y “de la Edad de Piedra”; la imagen que se tiene de las tribus aisladas es aún peor.
Desde que comenzara la ocupación indonesia en 1963, los papúes, especialmente en las zonas más remotas, han sido asesinados de forma rutinaria (aproximadamente 100.000 han muerto de esta forma), violados y torturados por soldados racistas.
Más recientemente, en octubre de 2010, el Gobierno de Indonesia admitió que los hombres a los que se veía torturar a dos papúes en un vídeo publicado en Internet eran militares.
Pero, ¿no existe una organización para protegerlos, parecida a la FUNAI, de Brasil, que pueda proporcionar pruebas e información, como fotografías aéreas?
No. No hay ninguna agencia gubernamental encargada de proteger, o incluso de trabajar con, los indígenas aislados o las tribus ya contactadas.
¿Por qué es necesario dar difusión a esta información?
Su supervivencia depende de que se conozca su existencia.
Cuantas más personas en todo el mundo sepan que existen pueblos indígenas no contactados en Papúa Occidental (y en otros lugares), y los comprendan, mayores serán sus posibilidades de ser protegidos de las muchas y diversas fuerzas externas que los amenazan.
Por ejemplo, se está proyectando una carretera que atravesará una zona donde habitan miembros no contactados de una tribu. Cuanta más gente conozca el riesgo que supondrá la carretera, mayor será la posibilidad de paralizar el proyecto.
La opinión pública internacional es poderosa: es más probable que los gobiernos y las empresas escuchen cuando saben que hay miles de personas que apoyan los derechos de los pueblos indígenas.
¿Quieren permanecer aislados?
Los pueblos indígenas no contactados saben lo que es mejor para ellos y se mantienen en aislamiento por voluntad propia. Teniendo en cuenta el nefasto historial que registra Papúa Occidental en materia de derechos humanos, probablemente sea una decisión muy sabia, y es de importancia crítica para su futuro que se respete.
¿Por qué es su supervivencia esencial para la humanidad?
Los pueblos indígenas aislados no son atrasados, primitivos ni “de la Edad de Piedra”, que es el pensamiento predominante del Gobierno indonesio, que gobierna en Papúa Occidental.
Entre otras habilidades y modos de vida de enorme valor, tienen un conocimiento único de su medio ambiente, especialmente de las plantas y los animales.
Su diversidad nos muestra la viabilidad de otras formas de vida.